Agustín Bravo, Melody, Olivia Valère, Raquel Bollo, Ángel Garó, rivales

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En la ciudad hace demasiado calor para recibir a unos invitados en casa y agasajarles con una buena cena. Así que los nuevos VIP de Ven a cenar conmigo. Summer edition han agarrado las maletas (y las cacerolas) y se han trasladado a Málaga. La Costa del Sol se convertirá en el escenario perfecto, desde Benalmádena a Marbella, para que los cinco nuevos concursantes del programa demuestren sus cualidades como anfitriones.
 
Elegante y muy acostumbrado a tratar con estrellas de relumbrón, el presentador Agustín Bravo se posiciona como el rival más difícil en esta nueva tanda de concursantes. El presentador de Bellezas al agua o Bravo por la tarde llega dispuesto a demostrar que, además de galán, es también un chef de primera. No se lo pondrá nada sencillo Melody, una mujer pata negra con arte y desparpajo suficiente como para convertir cualquier velada en un evento de primer nivel y alta intensidad. La exniña prodigio peleará duro por imponer su criterio entre tanto senior, una tarea harto complicada.
 
Todo el saber estar de la jet set marbellí tomarán cuerpo y forma en la gran Olivia Valère. La empresaria francesa, una de las grandes señoras de la noche (y el día) marbellí, no encontrará rival a la hora de organizar la velada más glamurosa, aunque a la hora de entrar en cocina Olivia se verá en una posición algo más apurada.
 
Rumbera como Melody, glamurosa como Olivia y con sobradas tablas televisivas como Agustín, Raquel Bollo reúne suficientes cualidades para erigirse como una dura rival en la competición. Su dominio de los pucheros y la cocina más sabrosa están fuera de duda, aunque queda por ver si conseguirá controlar su temperamento cuando algo se le tuerce.
 
Y entre todos ellos, otro gran nombre de la televisión: Ángel Garó. El humorista ha visto reverdecer laureles de fama y focos mediáticos en los últimos años y no piensa desaprovechar estar oportunidad para, además de ganar 3.000 euros, demostrar una vez más que sigue siendo un genio a la hora de recrear la comedia más surrealista. ¿Sucederá lo mismo con su cocina?
 
En la ciudad hace demasiado calor para recibir a unos invitados en casa y agasajarles con una buena cena. Así que los nuevos VIP de ‘Ven a cenar conmigo. Summer edition’ han agarrado las maletas (y las cacerolas) y se han trasladado a Málaga. La Costa del Sol se convertirá en el escenario perfecto, desde Benalmádena a Marbella, para que los cinco nuevos concursantes del programa demuestren sus cualidades como anfitriones.
 
Elegante y muy acostumbrado a tratar con estrellas de relumbrón, el presentador Agustín Bravo se posiciona como el rival más difícil en esta nueva tanda de concursantes. El presentador de ‘Bellezas al agua’ o ‘Bravo por la tarde’ llega dispuesto a demostrar que, además de galán, es también un chef de primera. No se lo pondrá nada sencillo Melody, una mujer pata negra con arte y desparpajo suficiente como para convertir cualquier velada en un evento de primer nivel y alta intensidad. La exniña prodigio peleará duro por imponer su criterio entre tanto senior, una tarea harto complicada.
 
Todo el saber estar de la jet set marbellí tomarán cuerpo y forma en la gran Olivia Valère. La empresaria francesa, una de las grandes señoras de la noche (y el día) marbellí, no encontrará rival a la hora de organizar la velada más glamurosa, aunque a la hora de entrar en cocina Olivia se verá en una posición algo más apurada.
 
Rumbera como Melody, glamurosa como Olivia y con sobradas tablas televisivas como Agustín, Raquel Bollo reúne suficientes cualidades para erigirse como una dura rival en la competición. Su dominio de los pucheros y la cocina más sabrosa están fuera de duda, aunque queda por ver si conseguirá controlar su temperamento cuando algo se le tuerce.
 
Y entre todos ellos, otro gran nombre de la televisión: Ángel Garó. El humorista ha visto reverdecer laureles de fama y focos mediáticos en los últimos años y no piensa desaprovechar estar oportunidad para, además de ganar 3.000 euros, demostrar una vez más que sigue siendo un genio a la hora de recrear la comedia más surrealista. ¿Sucederá lo mismo con su cocina?
 
 
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