Marcos Mundstock, la voz y el rostro de Les Luthiers, el contrapunto
Si existieron momentos deliciosos, fueron aquellos vividos junto a Marcos Mundstock, la voz y el rostro de Les Luthiers, su contrapunto. Y contrapunto es la técnica de improvisación y composición musical que evalúa la relación existente entre dos o más voces independientes con la finalidad de obtener cierto equilibrio armónico.
Su voz representó siempre el hilo conductor de Les Luthiers, LL, la firma del grupo en WhatsApp, las iniciales de Laura y Lucía, su mujer y su hija -Marcos estaba casado con la cardióloga Laura Glezer con quien tuvo a su única hija-.
Nacido en Santa Fe, hijo de inmigrantes judíos procedentes de Polonia, su familia se trasladó posteriormente a Buenos Aires donde se afincó de manera definitiva. A Marcos le fascinaba la música pero no quiso someter a su padre a gastos extraordinarios porque sabía lo duro de la economía doméstica.
Mientrs estudiaba ingeniería, hizo su carrera de locutor. Trabajó en Radio Muncipal logrando tener dinero para comprar el sueño de su vida, un piano, y recibir clases de música. Pero su vida ya estaba marcada como el hombre de esmoquin con la carpeta. El contrapunto de quenes formaron un excepcional grupo de amigos unidos por su amor al humor culto y la música perfecta. Un sello excepcional que permanece con todo su brillo en Argentina.
No murió de coronavirus sino de larga enfermedad. Con el fallecimiento de Marcos, Les Luthiers sufre una dolorosa tercera pérdida tras la de Gerardo Masana en 1973, a los 36 años, y Daniel Rabinovich en 2015, cuando tenía 71.
Con la retirada voluntaria de Carlos Núñez Cortés a los 75 años, en 2017, tras recibir con sus compañeros en Oviedo el premio Princesa de Asturias de Humanidades, solamente permanecen dos de los fundadores, Carlos López Puccio y Jorge Maronna.
Les Luthiers se ha ido renovando en sus giras con las incorporaciones de Tato Turano, Martín O’Connor, Roberto Antier y Tomás Mayer Wolf. Aunque Marcos estaba limitado, por su enfermedad, pudo grabar un vídeo para estar presente en el Congreso Internacional de la Lengua celebrado en Córdoba (Argentina) en abril de 2019. Fue una despedida perfecta y memorable. Dejó grabado su legado.
Formado inicialmente en el coro universitario de Buenos Aires durante los años de estudiantes, Les Luthiers arrancó su grupo inicialmente bajo la marca de I Musicisti (1965-1966) y después (desde 1967) bajo el sello de su nombre actual que les dio proyección internacional.
El adiós de LL a Marcos
En su último adiós, Les Luthiers quisieron recordar a Marcos como la figura excepcional que siempre fue en el humor, la sensibilidad, y en la marca (dimensión, cultura y legado compartido por millones de personas) del español:
"Después de más de un año de lidiar con un problema de salud que se tornó irreversible, Marcos, nuestro compañero y amigo, finalmente partió. De ahora en más, cada uno de nosotros deberá empezar a transitar el doloroso camino de aprender a convivir con su ausencia. Pero no hoy. Pensar hoy en partidas o ausencias nos resulta demasiado triste. Hoy preferimos evocar todo lo que Marcos nos brindó y conservaremos con nosotros para siempre.
Nos quedará el recuerdo de su voz, única e inconfundible. Y de su presencia sobre el escenario, con su carpeta roja y frente al micrófono, que cautivaba al público antes de decir una sola palabra. Nos quedará su profesionalismo. Su autoexigencia, su ética de trabajo y su respeto extremo por el público, valores que todos compartimos y que él defendió desde el momento de la creación misma de Les Luthiers.
Nos quedará el recuerdo de su compañerismo, tanto en lo profesional y en lo personal. La inteligencia de sus comentarios y su respeto por las opiniones ajenas, aún en la disidencia. Nos quedarán grabados los aprendizajes compartidos que hicimos a lo largo de tantos años. Los lugares del mundo que descubrimos juntos. La sorpresa que compartíamos cada vez que Les Luthiers dada un nuevo salto y llegaba más y más lejos. Nos quedará el recuerdo de sus chistes cotidianos, rápidos y asombrosamente ingeniosos, listos para brindarnos una chispa de alegría en todo momento, en las buenas y en las malas.
Nos quedarán tantas cosas de Marcos , que aun en medio de la tristeza y el dolor que estamos viviendo, no podemos dejar de agradecer a la vida, y de sentirnos privilegiados de haber recorrido con él todo este tramo del camino".
Su voz representó siempre el hilo conductor de Les Luthiers, LL, la firma del grupo en WhatsApp, las iniciales de Laura y Lucía, su mujer y su hija -Marcos estaba casado con la cardióloga Laura Glezer con quien tuvo a su única hija-.
Nacido en Santa Fe, hijo de inmigrantes judíos procedentes de Polonia, su familia se trasladó posteriormente a Buenos Aires donde se afincó de manera definitiva. A Marcos le fascinaba la música pero no quiso someter a su padre a gastos extraordinarios porque sabía lo duro de la economía doméstica.
Mientrs estudiaba ingeniería, hizo su carrera de locutor. Trabajó en Radio Muncipal logrando tener dinero para comprar el sueño de su vida, un piano, y recibir clases de música. Pero su vida ya estaba marcada como el hombre de esmoquin con la carpeta. El contrapunto de quenes formaron un excepcional grupo de amigos unidos por su amor al humor culto y la música perfecta. Un sello excepcional que permanece con todo su brillo en Argentina.
No murió de coronavirus sino de larga enfermedad. Con el fallecimiento de Marcos, Les Luthiers sufre una dolorosa tercera pérdida tras la de Gerardo Masana en 1973, a los 36 años, y Daniel Rabinovich en 2015, cuando tenía 71.
Con la retirada voluntaria de Carlos Núñez Cortés a los 75 años, en 2017, tras recibir con sus compañeros en Oviedo el premio Princesa de Asturias de Humanidades, solamente permanecen dos de los fundadores, Carlos López Puccio y Jorge Maronna.
Les Luthiers se ha ido renovando en sus giras con las incorporaciones de Tato Turano, Martín O’Connor, Roberto Antier y Tomás Mayer Wolf. Aunque Marcos estaba limitado, por su enfermedad, pudo grabar un vídeo para estar presente en el Congreso Internacional de la Lengua celebrado en Córdoba (Argentina) en abril de 2019. Fue una despedida perfecta y memorable. Dejó grabado su legado.
Formado inicialmente en el coro universitario de Buenos Aires durante los años de estudiantes, Les Luthiers arrancó su grupo inicialmente bajo la marca de I Musicisti (1965-1966) y después (desde 1967) bajo el sello de su nombre actual que les dio proyección internacional.
El adiós de LL a Marcos
En su último adiós, Les Luthiers quisieron recordar a Marcos como la figura excepcional que siempre fue en el humor, la sensibilidad, y en la marca (dimensión, cultura y legado compartido por millones de personas) del español:
"Después de más de un año de lidiar con un problema de salud que se tornó irreversible, Marcos, nuestro compañero y amigo, finalmente partió. De ahora en más, cada uno de nosotros deberá empezar a transitar el doloroso camino de aprender a convivir con su ausencia. Pero no hoy. Pensar hoy en partidas o ausencias nos resulta demasiado triste. Hoy preferimos evocar todo lo que Marcos nos brindó y conservaremos con nosotros para siempre.
Nos quedará el recuerdo de su voz, única e inconfundible. Y de su presencia sobre el escenario, con su carpeta roja y frente al micrófono, que cautivaba al público antes de decir una sola palabra. Nos quedará su profesionalismo. Su autoexigencia, su ética de trabajo y su respeto extremo por el público, valores que todos compartimos y que él defendió desde el momento de la creación misma de Les Luthiers.
Nos quedará el recuerdo de su compañerismo, tanto en lo profesional y en lo personal. La inteligencia de sus comentarios y su respeto por las opiniones ajenas, aún en la disidencia. Nos quedarán grabados los aprendizajes compartidos que hicimos a lo largo de tantos años. Los lugares del mundo que descubrimos juntos. La sorpresa que compartíamos cada vez que Les Luthiers dada un nuevo salto y llegaba más y más lejos. Nos quedará el recuerdo de sus chistes cotidianos, rápidos y asombrosamente ingeniosos, listos para brindarnos una chispa de alegría en todo momento, en las buenas y en las malas.
Nos quedarán tantas cosas de Marcos , que aun en medio de la tristeza y el dolor que estamos viviendo, no podemos dejar de agradecer a la vida, y de sentirnos privilegiados de haber recorrido con él todo este tramo del camino".
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