MasterChef revolucionario: competición al límite de aspirantes y jurado
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Llega el MasterChef más revolucionario. Pepe Rodríguez, Samantha Vallejo-Nágera y Jordi Cruz se convierten en mentores cada uno de un grupo de aspirantes y se ocuparán de su formación y evolución. En la última prueba de selección del casting, los 15 aspirantes que hayan conseguido el delantal deberán decidir con qué juez participarán, formándose así tres equipos con cinco candidatos. La reputación de los jueces y su ojo a la hora de reconocer el talento están en juego.En la presentación de la nueva edición, la directora de Entretenimiento de TVE, Toñi Prieto, insistió en que lejos de desgastarse MasterChef está más vivo que nunca.
Cambios en la mecánica y más competitividad y piques -siempre sanos-, son algunas de las novedades. “Lo de hacer equipos es una gracia, el pique entre los equipos y los jueces se hace más divertido”, afirmó Pepe Rodríguez. "Seguimos con el mismo buen rollo, cada uno respetando los roles del otro. El programa funciona porque es como una ensalada muy bien aliñada, y lo es gracias a un trabajo de mucha gente”.
Samantha Vallejo-Nágera destacó la suerte de “tener un público que nos quiere y nos para por la calle para preguntar cuándo vuelve MasterChef: Eso es lo más bonito”. Jordi Cruz respondió que “aunque Samantha vaya de tapadillo, al final competirá también como la que más”.
Nuevo récord de inscripciones
Más de 25.000 personas se apuntaron este año al casting y entre los seleccionados hay un empresario nacido en Alemania que fue ciclista de un equipo profesional portugués, una interiorista y fotógrafa gallega, un exfutbolista ahora pescadero, un cerrajero forense y una administrativa de una marmolería que diseña lápidas. En cada programa el jurado exigirá sacrificio, llegar al límite, cocinar como si fuese su último día y no rendirse nunca.
El ganador entrará en el selecto club del que forman parte Marta Verona, Carlos Maldonado o Jorge Brazález. Además, entre otras cosas, se llevará el trofeo que le acredita como vencedor, 100.000 euros y la posibilidad de publicar su propio libro de recetas.
Sostenibilidad y aprovechamiento
En esta edición el jurado insistirá en la sostenibilidad y el aprovechamiento. En la cocina se pueden utilizar todos los alimentos que nos sobran o que desecharíamos y convertirlos en platos de auténtica estrella Michelin. MasterChef mejorará las habilidades culinarias no solo de los aspirantes, sino también del espectador. Los vegetarianos o los espectadores que lleven un tipo de dieta concreto o tengan intolerancias alimenticias también podrán poner en práctica todo lo que aprendan.
Los mayores retos de la edición
Entre otros desafíos, en esta edición, los aspirantes se enfrentarán a la prueba más complicada de repostería: la croquembouche, un postre que ningún concursante de MasterChef ha podido replicar a la perfección hasta hoy.
Ser cocinero es una de las profesiones más duras y sacrificadas, y solo quién esté dispuesto a dejarse la piel tiene hueco en este oficio. La tensión será palpable, pero los aspirantes también vivirán momentos de emoción, risas y diversión.
Los jueces se meterán en la piel de los aspirantes y se pondrán la chaquetilla para cocinar cada semana. Samantha Vallejo-Nágera cocinará en una prueba en la que realizará varias elaboraciones con aceite. Jordi Cruz hará lo propio en una batalla donde el ingrediente principal será el huevo y Pepe Rodríguez demostrará que es capaz de elaborar un plato vegetariano, integrando ingredientes fermentados.
También algunos de los invitados y antiguos concursantes demostrarán que siguen siendo los reyes de los fogones: Ona Carbonell, preparará croquetas con rellenos y rebozados diferentes; su compañero Santiago Segura volverá a demostrar su mano con la repostería replicando un postre de Jordi Cruz; y Josetxo, ganador de MasterChef Junior 6, preparará un exquisito plato con tres ingredientes.
Los aspirantes conocerán la riqueza gastronómica de España en su recorrido por los lugares más impresionantes en busca de los mejores productos: entre otros, el monasterio de San Pedro de Cardeña de Burgos, la península de La Magdalena en Santander, la ermita de San Juan de Gaztelugatxe en Vizcaya, los olivares de Úbeda (Jaén), el Castillo Palacio de Peñíscola, las playas de Almería (Capital gastronómica de 2019) o el Teatro Calderón de Madrid, donde servirán un almuerzo al elenco del musical ‘West Side Story’.
Invitados de estrella Michelin y conocidos de MasterChef
Los aspirantes conocerán los secretos de la alta cocina con la visita de reconocidos chefs como Martín Berasategui (10 estrellas Michelin), Elena Arzak (4 estrellas Michelin), Pedro Subijana (3 estrellas Michelin), Joan Roca y su hijo Marc Roca (3 estrellas Michelin), Dabiz Muñoz (3 estrellas Michelin), Quique Dacosta (3 estrellas Michelin), Eneko Atxa (5 estrellas Michelin), Dani García (3 estrellas Michelin y conductor de ‘Hacer de comer’), Francis Paniego (2 estrellas Michelin), Jesús Sánchez (2 estrellas Michelin), Aitor Arregui (1 estrella Michelin) y Gastón Acurio, promotor de la gastronomía peruana que ostenta el Premio a los logros de toda una vida, galardón que forma parte de The World’s 50 Best Restaurants 2018.
Aspirantes de otras ediciones volverán a la que ya es su casa para aconsejar y, en algunos casos, ayudar a los nuevos aspirantes, entre ellos, Marta Verona, ganadora de ‘MasterChef 6’ y sus compañeros de edición Ketty, Toni, Víctor, Sofía y Daniel; de Junior, María Blanco y Juan Antonio (‘MasterChef Junior 5‘) y Jefferson (‘MasterChef Junior 4’). También vendrán compañeros y participantes de ‘MasterChef Celebrity’: Paz Vega, Boris Izaguirre, Mario Vaquerizo, Antonia Dell’Atte, Santiago Segura, Carmen Lomana, Edu Soto, Pepón Nieto y las retales Anabel Alonso y Bibiana Fernández.
Una nueva cocina, con vistas a la Gran Vía de Madrid
El plató de MasterChef también cambia. Se ha abierto la zona de cocinas al supermercado, en el que se verá una cristalería a modo de escaparate que permite la entrada de luz en el lugar del antiguo botellero. Nuevas celosías, en las puertas principales y en la circular del restaurante, le dan un tono más alegre. La zona del restaurante ha sido remodelada con dos grandes ventanales en los que se verá la Gran Vía.
El restaurante se convierte en un entorno acogedor, con guiños a la cocina casera: chimenea, nuevas sillas y mesas de madera lo convierten en un espacio tradicional muy reconocible. La zona está coronada por una impresionante lámpara con bombillas de filamento y elementos de una vajilla blanca. Una pieza única diseñada y creada por el equipo de arte de MasterChef.