Lo mejor de "El regreso de Mary Poppins" no es solo el papel de Emily Blunt

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Han transcurrido 85 años desde que Mary Poppins llegase flotando por el aire a través de la mano de su autora P.L. Travers, y 55 desde la versión cinematográfica de Robert Stevenson (director y buque insignia de las películas de personajes reales de la factoría de Mickey Mouse), con Julia Andrews dando vida a la institutriz.

Hace cinco años ya del estreno de Al encuentro de Mr. Banks, en el que se recrean las arduas negociaciones entre la autora y el todopoderoso magnate de los estudios, por lograr los derechos de la obra y sacar adelante la película que combinaba acción real y animación.

Allá por 1964, la película supuso un verdadero bombazo, convirtiéndose en una cinta de cabecera para varias generaciones, que supieron ver en ella el cruce perfecto entre la realidad y la fantasía.

Ahora el tiempo parece haberse detenido en la época de la gran depresión, una generación después, para regresar al 17 de la calle del Cerezo con un impresionante espectáculo musical.

Lo primero de lo que hay que hablar es de las coordenadas temporales en las que se mueve Mary Poppins Returns: los niños de la primera cinta son ya una mujer y un hombre, (viudo él y con dos hijos) en un apuro económico que les puede llevar a perder su hogar.

El escenario es Londres en los años 30 que se enfrenta a la gran depresión, algo que queda patente en la lucha obrera de Jane Banks, en la pobreza retratada en las calles y hasta en rimas de las canciones que se atreven a señalar a la evasión que proporciona el alcohol como causante de muchos problemas.

Emily Blunt ha deconstruido y rehecho el personaje, con permiso de la Andrews, y como ella misma se autodefine en su propio papel, “prácticamente perfecta en todo”. Interpreta con encanto, baila con elegancia, y canta como los ángeles, e incluso rapea.

Le acompaña la nueva versión del deshollinador, Lin-Manuel Miranda que ahora es farolero, viejo amigo y discípulo de la niñera y de su magia. Canta y baila con con deslumbrante brillo y color. Ben Whishaw, Emily Mortimer, Julie Walters, Colin Firth, Meryl Streep, Angela Lansbury, y la emotiva intervención de Dyck Van Dyke, son las otras caras que aportan vida a este nuevo encuentro con la mágica cuidadora.

El público más fan del personaje va a gozar de El regreso de Mary Poppins de principio a fin y los nuevos espectadores tienen motivos más que suficientes para caer rendidos ante los encantos de esta propuesta de cine musical familiar.
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