Un email revela la historia del príncipe Andrés. (Foto: Wikimedia)

Las mentiras del Príncipe Andrés a través de un email

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El diario "The Mirror" ha publicado nuevas informaciones que ponen en entredicho la imagen del príncipe Andrés de Inglaterra.

Según un correo electrónico de Epstein que ha salido a la luz, se demostraría que el príncipe se reunió con él en más de una ocasión después de su ingreso en prisión en 2008, contradiciendo lo que afirmó en una entrevista con la BBC en 2019. En aquella ocasión, Andrés aseguró que solo se habían visto una vez en diciembre de 2010 para romper su amistad.

Además, un documental emitido en la televisión británica sugiere que el príncipe Andrés y Jeffrey Epstein llevaron a cabo orgías en una isla privada con un grupo de nueve jóvenes mujeres.

Las declaraciones de Virginia Roberts Giuffre, quien acusó a Epstein de abusar de ella, revelan que mantuvo relaciones sexuales con el príncipe Andrés en una orgía cuando ella tenía aproximadamente 18 años.

El programa también muestra documentos médicos que prueban que Virginia, cuando era menor, acudió a un ginecólogo debido a un sangrado abundante.

El documental "Dispatches" tiene pruebas de que el príncipe Andrés y Epstein se reunieron en al menos diez ocasiones durante sus doce años de amistad, en visitas que a veces se extendían durante días. Se destaca la estrecha relación entre ambos, ya que Epstein tenía hasta 13 números de teléfono distintos para comunicarse con el miembro de la Casa Real británica.

El programa también revela que Epstein consideraba al príncipe Andrés como el mayor "trofeo" de su red de tráfico sexual.

Este escándalo supone una nueva preocupación para corona, ya que Andrés fue desmentido desde el palacio respecto a las acusaciones. Además, se suman los problemas recientes que ha revelado su nieto, el príncipe Harry, quien ha denunciado el acoso mediático al que ha sido sometido.

En resumen, las nuevas informaciones y el documental han puesto al príncipe Andrés en el centro de la controversia, generando preocupación para la familia real británica.
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