Tom Cruise y Misión: Imposible - Fallout, tremendo y asombroso espectáculo

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Si algo saben hacer Chris McQuarrie y Tom Cruise es unirse y trabajar para lanzar películas alucinantes.  tras sorprender con Jack Reacher en 2013, dieron un salto mortal con Misión: imposible - Nación secreta y ahora repiten con una cinta de acción rodada de forma impecable.

Misión: Imposible - Fallout se ha convertido en un ejercicio extenuante, alcanzando cotas de calidad increíbles en la saga: tiene secuencias que pasarán a la historia del cine por su complejidad y su acabado visual.

Un claro ejemplo de ello, sin entrar en spoilers, es la pelea en los baños, la persecución por las calles de París, el salto HALO, la persecución por los tejados y, como no, el enfrentamiento de los helicópteros. No hay un solo fotograma que defraude al espectador porque la cinta es una gran película de acción. 

La trama no es una sorpresa. Ethan Hunt (Tom Cruise), agente de operaciones de campo para el IMF, una agencia de élite dedicada al espionaje que se encarga de llevar a cabo peligrosas misiones internacionales, se enfrenta a nuevas amenazas contrarreloj después de que una misión salga mal.

Su objetivo final será desactivar dos bombas nucleares con las que Solomon Lane pretende derribar el sistema mundial e instaurar la anarquía. Además de contar con sus habituales colaboradores: Luther Stickell (Ving Rhames), Benji Dunn (Simon Pegg) y Alan Hunley (Alec Baldwin), se volverá a ver a la espía del MI6 Ilsa Faust (Rebecca Ferguson) y se conocerá a una nueva directora de la CIA (Angela Bassett).

Misión: Imposible - Nación secreta era una película más pulida, más seria y verosímil, mientras que Fallout se deja llevar más por el sentido del espectáculo e incluye un apartado que combina a la perfección con la acción: el humor. 

Existe cierta continuidad respecto a otras cuestiones que hacen muy bien en la nueva Misión: Imposible. Una de ellas es el villano Solomon Lane, interpretado de maravilla por Sean Harris y la voluble Ilsa Faust a la que da vida la carismática Rebecca Ferguson.
 
Cruise ha cumplido su venganza y ha conseguido ofrecer una de las películas más deslumbrantes dentro del género del blockbuster de infarto. Misión: Imposible - Fallout es una auténtica sinfonía de vertiginoso entretenimiento que podría considerarse un compendio a modo de grandes éxitos de la saga. 
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